La localización, el tipo de vivienda y el estado del inmueble son algunos de los factores más importantes a tener en cuenta.
La crisis sanitaria, la guerra entre Rusia y Ucrania y la inflación, entre otros, han supuesto cambios económicos que también inciden en el inmobiliario. Aunque es un sector que se mantiene, inversores nacionales e internacionales se preguntan si todavía es un buen momento para comprar una vivienda para invertir.
Según el Observatorio de Aedas Homes, el 14,3% de los españoles que se plantea comprar una vivienda lo haría como inversión. Y es que la adquisición de una casa para invertir se convierte en el motivo que más crece en los últimos seis meses y coincide con un nivel histórico de ahorro y una inflación disparada.
El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha dado a conocer que el número de parados se redujo en más de 86.000 personas en el mes de abril, y se han superado por primera vez los 20 millones de ocupados.
Para Jesús Duque, vicepresidente de Alfa Inmobiliaria, estos datos nos llevan a pensar que el precio de la vivienda continuará en ascenso, pero moderado. “No esperamos que superen el 2-3%, salvo en algunas regiones de España como Málaga, Valencia y Madrid", afirma Duque, quien también pronostica que el alquiler continuará siendo "la salida más accesible para quienes se independizan por primera vez”.
Así que, por todo ello, siempre y cuando se adquiera una vivienda atractiva (en precio, ubicación, estado, etc.), “estamos convencidos de que continúa siendo un buen momento para invertir en vivienda. De hecho, y según nuestros datos internos, 1 de cada 10 propiedades intermediadas por Alfa Inmobiliaria como 2021 tuvo como objetivo final la inversión”.
Por su parte, Carles de la Iglesia, socio de Revel, opina que debemos tener en cuenta que nos movemos en un entorno internacional complicado, en el que los tipos de interés siguen cerca de mínimos históricos y las rentabilidades de fondos de inversión de la mayoría de los sectores han caído a cifras negativas.
“Así pues, la idea de invertir en residencial escogiendo bien el producto nos puede situar en rentabilidades medias entre el 4% y el 7%. Además, las zonas céntricas de las grandes ciudades siguen teniendo cierto recorrido y podemos ver revalorizaciones del 6%-8% en los próximos 2 años”, recalca.
Beneficios de comprar vivienda para invertir
Aedas Homes refleja, que, en los últimos seis meses, la demanda de vivienda que busca un lugar para invertir su dinero es la que más ha crecido. Exactamente, 1,8 puntos, pasando del 12,5% al 14,3%. Y entre las ventajas de esta operación está protegerse de la creciente inflación, un fenómeno con el que no estamos acostumbrados a lidiar, y que se come los ahorros a mucha velocidad, según Jesús Duque.
Destaca también que la adquisición para alquilar supone la posibilidad de obtener unos ingresos estables por unos ahorros que en el banco no aportan nada, y que en la bolsa, y salvo que se cuente con un profundo conocimiento de la misma, cuenta con más riesgo.
Desde Revel creen que la clave para que la operación de inversión en vivienda sea beneficiosa frente a otras opciones es escoger bien la localización y el tipo de activo. En cuanto a la localización, el centro de las grandes ciudades es garantía de liquidez en caso de necesidad de desinversión y de alta demanda de alquiler. “Esto nos asegurará poder escoger un perfil de inquilino solvente y disfrutar de una buena rentabilidad con muy poco riesgo”.
Referente al tipo de activo, en Revel apuestan por viviendas bien conservadas o recién reformadas, que las situarán por encima de la media del mercado y nos brindarán mayor seguridad y menores costes de mantenimiento o reforma.
Buenas previsiones
Los expertos se muestran positivos respecto al aumento de compra como inversión. En Alfa Inmobiliaria ven que, al menos hasta final de año, en que no esperamos grandes incrementos en los tipos de interés, “continuaremos manejando un porcentaje cercano al 10% de viviendas que se compran como inversión. Pero esto que afirmo se refiere a la vivienda de segunda mano”.
Carlos de la Iglesia, por su parte, destaca como factor clave que se siga reactivando la movilidad internacional. Esto, sumado a la alta demanda interna de alquiler en los centros urbanos, hace prever cierta tensión al alza de precios. “No podemos olvidar que las grandes ciudades en España aún presentan precios muy atractivos si los comparamos con otras ciudades europeas y eso las sitúa en el punto de mira de inversores extranjeros por el potencial de revalorización que todavía existe”.
El panorama en la vivienda de obra nueva es diferente. El responsable de Alfa Inmobiliaria responde que es una actividad sujeta a otro tipo de variables, -como son los incrementos de los materiales, el enorme incremento en energía y el transporte, o las dificultades para encontrar mano de obra adecuada- y sí pueden llevar a comprometer enormemente las previsiones realizadas meses atrás.